Síntomas del estrés laboral y cómo reducirlos

¿Sufres de estrés en el trabajo? No estás solo. El estrés laboral se ha convertido en el mal de nuestro siglo, y se manifiesta en una gran variedad de síntomas cuyas causas es preciso combatir y reducir al mínimo, ya que pueden llevar a trastornos psicológicos y problemas de salud irreversibles.

La buena noticia es que, una vez has detectado los síntomas y eres consciente de que sufres de estrés laboral, puedes tomar medidas para reducir estos síntomas o eliminarlos completamente. Por eso, primero veamos cuáles son los síntomas del estrés laboral, y luego cómo reducirlo.

¿Cuáles son los síntomas del estrés laboral?

Agotamiento físico y/o mental

El primer síntoma y el más característico del estrés en el trabajo es el agotamiento físico y/o mental. Nota como pongo «y/o», porque puede presentarse el uno, el otro o ambos.

¿Te sientes cansado todo el tiempo aunque duermas la cantidad de horas adecuadas? ¿La sensación de agotamiento físico no se va y sientes como si todo el tiempo estuvieras en una guerra? ¿Sientes que tu mente está dispersa y no tiene la concentración ni la claridad habituales…?

Todas estas son señales del agotamiento general producido por estrés en el trabajo. O, para ser más preciso, de todas las tensiones corporales y mentales que caracterizan dicho estrés, y que se producen constantemente y en cantidades masivas como respuesta a cada pequeña situación estresante que afrontas.

Algunas de las más comunes son la tensión en los hombros, la espalda y la región del plexo solar, el aumento de la presión intraocular y cerebral, apretar los dientes y los puños, tensar los dedos de los pies… En fin, te sorprendería la cantidad de pequeñas tensiones que se suman, gastan energía y extenúan tanto el cuerpo como la mente.

Tristeza

La tristeza es otro de los principales síntomas del estrés laboral. Ocurre porque estás sometido a una constante agitación y tensión, y te sientes agotado y sin capacidad para cumplir con las exigencias de tu trabajo o tus propias expectativas.

Además, es muy posible que no veas salida a tal situación y empieces a considerar que tu vida es así, que todo son problemas, dificultades, tensiones, etc. Esto, como es natural, produce tristeza e incluso puede llevar a la depresión, como veremos más adelante. Así que es preciso buscar maneras de combatir el estrés si ves que este síntoma aparece.

Irritabilidad

La irritabilidad y la tristeza son diferentes respuestas a la misma situación. Y pueden venir juntas o separadas. Pero la irritabilidad puede venir mucho antes y con mayor facilidad, ya que la respuesta natural a algo que nos molesta es sentir irritación. Ello en un intento inconsciente por alejar aquello que nos molesta o amenaza. 

Así pues, ¿te sientes molesto todo el tiempo? ¿Explotas con facilidad o tienes ganas de hacerlo pero te contienes? ¿Notas como tu sentido del humor ya no es como antes y de repente todo es un fastidio…? Pues, aquí tienes una de las principales señales que indican lo estresado que estás.

Apatía

Uno de los síntomas del estrés en el trabajo más notables es la apatía, que surge realmente del extremo agotamiento. Mientras más agotado estés, menos te importan las cosas.

Pero hay una segunda causa. Y es el considerar tu trabajo y todo llo que gira en torno a él como lo único que importa. Estás tan enfrascado en tu vida laboral, que simplemente pierdes interés por todo lo demás.

Algo importante es que la apatía puede no parecer algo peligroso, y no sentimos la necesidad de reducir el estrés solo por eso. Pero si es sostenida, con el tiempo puede llegar a convertirse en tristeza y, en última instancia, llevar a la depresión.

Baja autoestima

Está demostrado que el estrés en el trabajo y la baja autoestima tienen una relación muy estrecha. Cuando uno aumenta, el otro también. ¿Pero cómo se manifiesta la baja autoestima en el ámbito laboral? Por ejemplo, cuando dudas continuamente de tu capacidad o sientes que los problemas pueden más que tú, haciendo tambalear tu confianza en ti mismo.

Esto surge como consecuencia del agotamiento, la baja motivación, la apatía y otros síntomas del estrés laboral. Pero no te das cuenta, porque está sumergida en las preocupaciones. Pero esto tiene una solución: combatir el estrés y reducir su intensidad. Con esto, es suficiente para que la capacidad laboral y, con ella, la autoestima aumenten de nuevo.

Dificultad para concentrarse

La dificultad para concentrarse es otro de los síntomas del estrés laboral. Y conduce a un obvio descenso del rendimiento, ya que la persona no es capaz de enfocarse completamente en lo que está haciendo. Esto puede ocurrir por el agotamiento, la falta de interés, un exceso de preocupaciones demandando constantemente la atención de tu mente, etc.

Alteración del sueño

Como has visto, la espiral de sufrimiento causada por el estrés laboral parece no tener fin. Y una de las consecuencias de esto es la alteración del sueño. No me refiero solamente a tener dificultad para quedarse dormido o al despertarse continuamente durante la noche. Me refiero también a dormir  toda la noche, pero no tener un sueño reparador. Es decir que, aunque duermas más de 7 u 8 horas, sigues cansado.

Falta de motivación

La falta de motivación es otro de los principales síntomas del estrés laboral. La padecen incluso quienes tienen una gran meta por delante y la posibilidad de cambiar su vida para mejor haciendo su trabajo. Y hasta le sucede a quienes adoran la profesión que están desempeñando. 

El problema es que, cuando hay estrés laboral, la motivación desaparece aunque sea grande. Simplemente, el cuerpo y la mente se niegan a seguir haciendo lo que estás haciendo. No a nivel consciente, por supuesto, sino a nivel inconsciente. Es tu organismo protegiéndose de aquello que le causa agotamiento, falta de sueño, tensión en todos los músculos, cansancio mental, etc.

Lo peor es que, al ver la poca motivación que tenemos, nos sentimos más estresados porque no rendimos como esperamos. Y esto nos puede llevar a sufrir de…

Depresión: uno de los peores síntomas del estrés laboral

La depresión es un trastorno mental más común de lo que imaginas. Si es por estrés en el trabajo, surge de la sensación de impotencia ante la gran masa de sufrimiento físico y mental que estás experimentando. Y también del sentir que no hay una salida a todos estos problemas, al menos no a corto plazo.

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Pero no confundas depresión con tristeza. La tristeza es un síntoma de la depresión. Pero también hay:

• pérdida de interés o placer en las cosas que antes nos interesaban
• sentimientos constantes de culpa
• disminución de la autoestima
• trastornos del sueño o del apetito
• una sensación persistente de cansancio
• falta de concentración.

Algunas de estas señales de depresión pueden mostrarse aislados, como ya vimos. Pero si aparecen juntas (no todas, pero una parte de ellas) es posible que sufras de depresión. Y es necesario combatir y reducir todo lo que puedas el estrés laboral que la causa.

Dolores musculares

Los dolores musculares ocurren como resultado de la tensión constante de los músculos debido al estrés laboral. Este sobre esfuerzo, como es natural, conduce a un agotamiento de los principales grupos musculares, agarrotamiento, contracción, etc.  Todo esto puede llegar a causar dolor e incluso una pérdida de fuerza muscular.

Problemas digestivos

Entre los síntomas más graves del estrés en el trabajo, se encuentran los problemas digestivos. Estoy hablando aquí no de un simple dolor de estómago, sino de cosas más graves. Por ejemplo, reflujos esofágicos, úlceras, inflamación intestinal y síndrome del colon irritable, por citar ejemplos. Algunos de estos trastornos pueden afectar el aparato digestivo para toda la vida

Otros problemas de salud…

Por último, quiero aclarar que el estrés laboral puede causar toda clase de problemas de salud, no solo en el sistema digestivo. De hecho, las enfermedades cardíacas en nuestra sociedad son en gran medida provocadas por el estrés laboral, que también aumenta las probabilidades de sufrir cáncer y diabetes tipo 2.

Ello por no mencionar la gran cantidad de otras enfermedades a las que le abres las puertas si sufres de estrés en el trabajo, ya que este disminuye la capacidad defensiva del sistema inmune. Así que es preciso combatir a toda costa el estrés laboral.

¿Cómo combatir o reducir los síntomas del estrés laboral?

Tómate un descanso

Si quieres combatir los síntomas del estrés y reducir al mínimo el malestar que te provoca una gran carga de trabajo o el constante surgir problemas y dificultades, tienes que hacerte la firme determinación de tomarte un descanso cada cierto tiempo.

Pero no me refiero a irse de vacaciones dos meses al año. Tampoco a dormir (a menudo, utilizamos el sueño como una vía de escape, pero al final esto no soluciona nada). De lo que hablo es de hacer del descanso y el esparcimiento parte de tu vida.

Para reducir los síntomas del estrés laboral, busca actividades que te gusten y te permitan descansar de las preocupaciones. Puede ser cualquier cosa simple. Darte un paseo de treinta minutos, salir a correr, tener un pequeño hobby, leer o simplemente sentarte y no hacer nada.

Y, en la oficina, evita esos maratones continuos de trabajo. Tómate un descanso cada cierto tiempo para levantarte, estirar el cuerpo y cambiar de postura. Una buena técnica es la Pomodoro, que consiste en hacer una pausa de 5 minutos cada 25 minutos.

Proponte metas razonables

“Es mejor conocer los propios límites que calcular mal las propias habilidades y perder el control.”

Patrick Rothfuss

La vida está llena de aparentes paradojas. Una de ellas es que, para superar tus límites, primero tienes que respetarlos. Y para respetarlos, hay que conocerlos. De lo contrario, te harás la costumbre (es muy probable que lo hayas hecho ya) de proponerte todo el tiempo metas irreales.

¿Cómo saber que estás haciendo esto? Es muy simple: si ves que has logrado muy pocas cosas de las que te has propuesto, o lo consigues a un costo muy alto (por ejemplo, con una gran cantidad de  agotamiento, deterioro de tus relaciones interpersonales, etc.), es porque te estás proponiendo metas por encima de tu capacidad.

Esta es una lección dura. Pero es preciso reconocer que no todo el mundo tiene la misma capacidad. Y no eres menos por ello. Simplemente eres tú. Una vez lo reconoces y te aceptas con tus limitaciones, estás en disposición de adecuar tus metas a tu capacidad, por ejemplo dividiéndolas en metas más pequeñas y realizables.

Recuerda siempre que la idea del maratón es recorrer 42 km a trote, no a la carrera. Puedes alcanzar lo que te propongas, pero solo si haces las cosas a tu ritmo y no fuerzas los resultados. De lo contrario, te será muy difícil reducir ese estrés laboral que está acabando contigo. 

Ejercicios físicos para reducir los síntomas de estrés laboral

El ejercicio físico no solo mejora la salud, sino que genera una sensación de bienestar general. Ello se debe a que desencadena la segregación de endorfinas, los neurotransmisores encargados de hacernos sentir bien.

Y es además una excelente forma de enfocar la mente, ya que se basa en el control del cuerpo y la respiración. Así que es una forma de meditación en movimiento.

Tan positivo es su efecto que los psiquiatras recomiendan una hora de ejercicio físico diario a sus pacientes con depresión. Y, como es lógico, también a las personas que sufren de estrés en el trabajo.

Por eso, te aconsejo crearte una rutina de ejercicios de moderado a intenso, y mantenerla. Verás resultados que parecen mágicos. Esta es una de las maneras más efectivas de combatir el estrés y reducir todos sus síntomas al mínimo.

Medita

La meditación ha demostrado ser muy efectiva a la hora de combatir el estrés laboral. Más que una forma de relajarse (no confundir la meditación con las técnicas de relajación) es un entrenamiento de la mente para aprender a afrontar las dificultades con tranquilidad y un espíritu desenfadado y abierto libre de emociones negativas.

Por eso, te aconsejo al menos 20 min de meditación diaria. Hay muchas técnicas que puedes utilizar. Pero yo te recomiendo zazen, vipassana o metta-bhavaba. Estas técnicas de meditación budista han demostrado ser las más efectivas a la hora de combatir el estrés.

Reducir Los Síntomas Del Estrés Laboral (Conclusiones)

El estrés laboral se puede combatir si haces un stop y pones un equilibrio en tu vida. Recuerda que trabajamos para vivir, no vivimos para trabajar. Así que, si tu trabajo te está causando malestar y atenta contra tu calidad de vida, es hora de hacer un cambio de estilo de vida. Y, más que nada, un cambio de paradigma.

Y las soluciones que te ofrecí más arriba son el comienzo. Si empiezas a tomarte descansos, proponerte metas razonables, hacer ejercicio físico y meditar, verás que en dos semanas los síntomas del estrés laboral habrán desaparecido o se habrán reducido tanto que ya no se podrá considerar estrés.

No pierdas tiempo. Vence la inercia y pon un orden en tu vida. Un orden sano y armonioso.