Ser una persona emocionalmente estable se logra cuando trasladas el peso de tu felicidad desde lo externo–anclada a una persona, tal vez- hacia tu interior. En caso contrario, una dependencia emocional se instala en el momento en el cual crees que una persona es la única responsable de tu alegría. Ahora, por motivo de tu salud mental, es hora de que aprendas a superar esa dependencia sentimental que te ha limitado hasta entonces.

No es un secreto que al universo le encanta llenar espacios vacíos, pero también al parecer a las personas les gusta estar apegadas a las cosas que no les convienen. Eso es un extraño paradigma que muchos no terminan por entender.

El problema radica que esa dependencia emocional es una gran limitante para que seas una persona libre, que disfrute de su propia compañía y se deleite en sus propias pasiones.

Pero no te preocupes, ya que este articulo funcionará como un disruptivo mental, para que abras tu mente hacia una nueva forma de pensamiento que te permitirá alcanzar una mejor vida libre del apego.

Te invito a quedarte hasta el final.

4 pasos para superar una dependencia emocional

El mundo actual nos ha invadido la cabeza con ideas absurdas tales como que una persona siempre tiene una media naranja esperándolo para completar todo su ser, y además hacen creer que hasta que no la encuentre no alcanzará la plena felicidad.

Pero ya lo decía John Lennon cuando escribió una carta emotiva rachando tal idea de una manera contundente.

“No nos contaron que ya nacemos enteros, que nadie en nuestra existencia es merecedor de llevar en la espalda la responsabilidad de completar lo que nos falta.”

Excelentes palabras, John.

Porque en realidad ya tú eres la fruta entera y estás llena de un jugo delicioso que parece el mejor néctar creado por el Universo.

Si lo empiezas a creer de ese modo, entenderás que no necesitas a nada ni nadie para ser feliz.

01 Pon tus necesidades en un primer plano

Uno de los principales problemas de una persona con tendencia al apego, es siempre dejar sus preferencias a un lado.

Es decir, nunca posee la suficiente autoconfianza para decidir por algo de manera enérgica sin importarle los pensamientos de los demás.

Un individuo dependiente siempre está a las expectativas de las opiniones. Vive para complacer. Pero la pregunta es: ¿cuándo será el turno de complacerte a ti como un ser valioso que eres?

Aquí lo tienes… ¿Cómo desarrollar una buena gestión emocional para ser feliz?

De esa manera, un ejercicio práctico es empezar a elegir y hacer las cosas a tu modo. Donde la principal beneficiada seas tú. Y no creas que estoy hablando de egoísmo, sino de priorizar la importancia que debes darte sobre otras personas que son de poco valor.

Además, muchas veces una persona dependiente emocionalmente está enlazada a una relación tóxica, donde su cónyuge tiene rasgos ególatras y solo vive pensando en sí misma.

¿No crees que el tiempo es muy valioso para perderlo con alguien que solo está creando raíces de amargura?

Además… el amor verdadero no duele.

02 Abraza la incertidumbre y aléjate de las expectativas

Lo único seguro en esta vida es la inconstancia. Ya que todo siempre está en constante movimiento y transformación, y por lo tanto nuestras vidas no están absueltas a esta regla universal. Así que abraza el cambio y fluye con él

Creer que todo va a ser para siempre es vivir fantaseando como en un cuento de hadas.

Asimismo, si piensas que una persona tiene que estar contigo toda la vida porque la “amas”; en realidad, eso tiene toda la pinta de ser más necesidad que otra cosa; y el amor está lejos de ser escasez.

En realidad, una persona emocionalmente independiente “ama, pero lejos de la necesidad”.

Ya que el amor es libertad; cuando una persona es libre se muestra como ella es, y por lo tanto todo es genuino y más importante aún: es reciproco.

Si vives intentando controlar todo, pierdes la oportunidad de disfrutar de los azares de la vida.

Y como dice el dicho, muchas veces las mejores cosas suceden cuando no se planifica nada; por eso hay que prepararse mentalmente para dejar fluir las cosas.

03 Lleva una vida increíble y disfruta de tu propia compañía

Uno de los factores clave que lleva a alguien a vivir en el apego hacia una persona es tener una vida poco estimulante. Es decir, sin pasiones ni proyectos ni hobbies.

Además, alguien con tendencia a depender emocionalmente suele no disfrutar de su propia compañía. Tienden a huir de la soledad como si lo fuese lo más aterrador del mundo.

Y cuando no logras encontrar sosiego en los brazos de la soledad, eso es un claro indicio de que no disfrutas estar contigo misma. También eso significa que probablemente no te sientas motivada por alguna pasión o proyecto propio.

¿Quieres saber qué es La Autoconsciencia emocional ?

Ya que un individuo libre del apego siente placer con el hecho de estar a solas. En realidad, crea espacios donde pueda estar lejos de lo externo. Asimismo, no tiene necesidad de estar con alguien porque lleva una vida que le genera entusiasmo; y como plus adicional, eso la convierte en una persona magnética.

Por lo tanto:

Anímate a practicar algún deporte o inscríbete en esa actividad que siempre quisiste.
Lee un libro en tus ratos de soledad y practica la meditación.
Entra en contacto con la naturaleza y da largos paseos por el parque.
Encuentra una meta que te motive: aprende un nuevo idioma, o tal vez perfecciona un viejo talento.

Dedica tiempo a ti misma y verás cómo ese amor propio empieza a renacer en ti. De esa manera verás la compañía de otras personas como un complemento hacia tu propio bienestar y no como un elemento indispensable para tu felicidad.

04 Empieza a darte el valor que deseas recibir

¿Por qué debes conformarte con algunas sobras en una relación?

Una flor alcanza a ser la más linda del jardín cuando es regada constantemente. Aunque por suerte, no necesitas de alguien para que brilles y saques a relucir lo mejor de ti. Ya que:

El mismo valor que recibes de los demás, es equivalente de alguna forma a eso que crees merecer.

Un ser que logra la independencia emocional sabe cómo cuidarse y darse una buena atención.

Es decir, el mismo amor que te das a ti, es el mismo amor que recibirás de parte de alguien más. Cuando logras apreciar lo que eres, no esperarás que alguien llegue con sobras de tiempo, atención o amor a conquistarte.

Si empiezas a cuidar tu cuerpo, tu salud, te regalas buenos momentos, te premias con ropa que te guste, te dices cosas bonitas constantemente…, en ese punto, ya nadie podrá llegar a darte una atención como si fueses un mendigo desesperado por comida.

¿Qué pasa en tu cerebro cuando te vuelves codependiente emocionalmente?

Hay que decirlo, el apego ocurre por una evidente falta de autoestima en conjunto con unas creencias limitantes que reinan en tu mente. Si logras fortalecer tu propia autoestima y eliminas poco a poco esas creencias limitantes, ten por seguro que jamás volverás a mendigar amor.

Alguien que no logra curarse de una dependencia emocional está experimentando un bajón de químicos en el cerebro. Es algo así como lo que viven los adictos a las drogas.

De hecho, se ha comprobado que el cerebro de una persona “enamorada” actúa igual que un individuo con trastornos compulsivos. Y aunque la dependencia emocional no ha sido etiqueta como un trastorno, parece y se ve como uno también.

Inconscientemente has asociado a una persona como la única fuente de placer en tu vida: probablemente todo gire en torno a ella. Así que tu cerebro no quieres que te alejes del escaso placer que recibe; aunque al final sea una combinación entre sufrimiento y pequeñas alegrías.

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Así, de esa forma, una persona crea una dependencia emocional hacia una pareja. Y si se le sumas creencias del tipo: no soy merecedora de un amor digno, no valgo lo suficiente o en las relaciones uno siempre se sufre, sube el nivel de codependencia y baja la estima propia.

9 Consejos para ser alguien libre de apego tanto emocional como físico

Entiende que el amor no es igual dependencia. Una persona puede amar y ser libre. De hecho, en eso se basan las relaciones sanas.
Nadie te pertenece, ni tú le perteneces a otra persona. Asimismo, nadie es responsable de tu felicidad más que tu misma.
Anclar tu felicidad en lo externo es vivir siempre a la deriva de alguien más. Si vives de esa forma, nunca tendrás el control absoluto ni de tus emociones ni de tu vida.
Aprende amar de forma genuina, donde la sensación de libertad reine en la relación.
Trabaja en ti misma y construye una buena gestión emocional; no entres en una nueva relación sin haber sanado heridas del pasado.
Observa cómo fueron las relaciones de las personas más influyentes en tu círculo más cercano, porque es probable que estés viviendo el mismo patrón que ellos: ¡atrévete a romperlo!
No fuerces nada, absolutamente nada. Lo que es para ti tendrá su momento, solo prepárate mental y espiritualmente para recibirlo de manera armoniosa.
Tu momento es ahora, vive en el presente. Aléjate de las ataduras del pasado y libérate de vivir en el futuro. Que no se te vaya la vida sin disfrutar del ahora.
Por último, la paciencia infinita genera resultados instantáneos. Aprende a esperar y, cuando menos lo esperes, eso que anhelas llegará a ti. Pero primero debes hacerte merecedora de eso.

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Despedida y agradecimientos:

Gracias por haber llegado hasta este punto. Estoy seguro de que te liberarás y superarás cualquier dependencia emocional que exista en ti. Tienes más poder del que crees y estás en buen camino para conocerlo y dominarlo. Sigue leyendo nuestros artículos y cuéntanos sobre qué otro tema te gustaría leer.

Un saludo y fuerte abrazo.